Liverpool dio un golpe de autoridad en la ida de los octavos de final de la Champions League al imponerse 0-1 al PSG en Francia.
En un duelo entre dos gigantes del fútbol europeo, el equipo de Luis Enrique llegaba con una racha imponente de 10 victorias consecutivas, mientras que los reds, en un gran momento de forma, buscaban seguir su camino ascendente.
Liverpool no había pateado al arco de Gigio Donnarumma en todo el partido. Harvey Elliot acababa de entrar y no había tocado la pelota. Y el PSG llevaba ¡¡27 REMATES Y 10 TIROS AL ARCO!! sin poder marcar un solo gol. Pese a todo eso, Los Reds salieron victoriosos del Parc des… pic.twitter.com/hJVZwt15To
— Invictos (@InvictosSomos) March 5, 2025
Con un estadio a reventar y un ambiente electrizante, el PSG dominó desde el inicio, imponiendo su juego de posesión y velocidad por las bandas, con Ousmane Dembélé como el jugador más desequilibrante.
Sin embargo, la falta de puntería y un Alisson inspirado mantuvieron el marcador en cero al descanso. La segunda mitad continuó con el mismo guion: un PSG volcado al ataque y un Liverpool replegado, resistiendo el asedio parisino.
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Los locales tuvieron oportunidades claras, incluyendo un gol anulado a Kvaratskhelia por fuera de juego, pero la resistencia inglesa se mantuvo firme.
A pesar de la insistencia local, la falta de eficacia condenaba al PSG, que veía cómo el tiempo se agotaba sin poder batir la portería rival.
Liverpool con golpe de autoridad
Y entonces llegó el golpe maestro. Harvey Elliott, recién ingresado, silenció el estadio con un latigazo preciso que batió a Donnarumma y puso el 0-1 definitivo para los reds. El PSG, dueño del partido durante casi todo el encuentro, pagó caro su falta de contundencia, mientras que el Liverpool aprovechó su única gran ocasión para salir victorioso.
