El defensa alemán del Real Madrid, Antonio Rüdiger, recordó que más allá de su marcaje, todo el equipo hizo «un muy buen trabajo manteniendo a raya» a Erling Haaland en la ida de las semifinales de la Liga de Campeones contra el Manchester City del año pasado, y dejó claro que tiene que «asumir de manera personal» el duelo que volverá a tener este martes contra «un superdelantero» y para lo que necesitará la ayuda del resto de equipos para evitar que reciba balones.
“Fue un buen partido el año pasado, todos hicimos un muy buen trabajo manteniendo a raya a Haaland. Los compañeros controlaron la situación y no recibió muchos pases como le hubiese gustado», expresó Rüdiger este lunes en rueda de prensa previa al partido.
El central, pese a ese gran marcaje, no jugó en la vuelta en el Etihad Stadium, una situación por la que considera que Carlo Ancelotti no tenía que pedirle «perdón». «Tenía su idea y yo como jugador tengo que aceptarla, aunque fue complicado hacerlo. El plan creo que será el mismo y tendremos que controlar a jugadores complicados y peligrosos como De Bruyne, Foden y, por supuesto, Haaland», advirtió.
El madridista no escondió que, «sin duda», el delantero noruego «es uno de los delanteros más fuertes» a los que se ha enfrentado, aunque e su carrera uno de los «más complicados» fue el argentino Sergio Agüero. «Haaland no es fácil de controlar, vive de los pases de sus compañeros y tenemos que intentar controlarles de la mejor manera posible, pero no lo puedes controlar todo», indicó Rüdiger.