La Juventus se atascó en su visita al Génova y firmó un empate (1-1) con los tantos de Federico Chiesa y de Albert Gudmundsson que podría alejar al equipo de Massimiliano Allegri del Inter, principal beneficiado de las intervenciones del jugador del partido: el portero español Josep Martínez.
El ex guardameta de Las Palmas se redimió del penalti que provocó el único tanto de la Juventus con dos intervenciones clave. Una al propio Chiesa en un mano a mano y la otra a un intento de Bremer en el último minuto del partido. Josep Martínez, con una mano prodigiosa, salvó el cabezazo del jugador brasileño, que rozó el gol a la salida de un córner y que habría colocado al Juventus como líder provisional de la Serie A.
Y es que los hombres de Allegri fracasaron en su intento por asaltar la primera plaza para meter presión a su principal rival por el título. Se encontró con un rival sólido y con la espesura de su propio juego, bastante gris y previsible durante casi todo el duelo. Sólo fue capaz de batir al Génova desde el punto de penalti y Josep Martínez se encargó de desbaratar las pocas ocasiones claras del cuadro turinés.